Características de un tablao flamenco en Sevilla
El flamenco es toda una expresión artística en el sur de España. Acudir a un tablao flamenco en Sevilla es una de las mejores formas para conocerlo más a fondo. Está compuesto por el cante, la música y el baile. Sobre todo destaca el sonido de la guitarra, lo cual lo hace más mágico aún.
En el flamenco encontramos la fusión entre la cultura gitana, árabe, judía y cristiana, consiguiendo así el mejor resultado posible que no te dejará para nada indiferente. Está dividido en palos, que se caracterizan por su gran intensidad emocional, tanto en las letras como en las canciones. Por lo que es una experiencia única el poder ver el espectáculo flamenco en directo.
Cuando acudes a un tablao flamenco en Sevilla para ver el espectáculo debes esperar todo tipo de sorpresas gratas. Los mejores profesionales trabajan en lugares como el Tablao los Gallos, para poder disfrutar del género en su más pura esencia. Verlo en directo será una experiencia completamente distinta.
El tablao flamenco en Sevilla es una de las mejores opciones para escuchar el género, dado que tomó aquí su fuerza entre 1860 y 1919, durante la Edad de Oro del Flamenco.
Originalemente el flamenco solo estaba formado por cante, pero el bailé comenzó a despertar el interés en el público que acudía a los tablaos. Así que que tuvo lugar el auge de los bailaores, al igual que el de la guitarra como acompañamiento. Esta fusión generó el espectáculo que conocemos actualmente.
A partir de los años 50 el flamenco evoluciona hasta convertirse en un género mundialmente conocido. En Andalucía es donde se encuentran la mayoría de tablaos para poder disfrutar en su esencia de este tipo de espectáculo. Cada vez son más los enamorados del flamenco que viajan para conocerlo en su esencia.
En qué consista el tablao flamenco dependerá del lugar donde lo elija. Es habitual que se representen diferentes palos con la combinación de música, cante y baile. Una de las características más personales de estos espectáculos es que dan pie a la improvisación de los artistas, por lo que cada una de las actuaciones es única.